martes, 10 de mayo de 2011

Aquí te dejo un resumen de la leyenda "El puente de La Llorosa"

El Puente de la Llorosa
Está localizado en la PR-14 Km. 49.5 a la salida del pueblo de Aibonito hacia Coamo. Este puente es el lugar donde sucedieron los hechos de esta leyenda.

Leyenda

Cuenta la leyenda que Moncho Luna residente del Barrio Asomante tenía el vicio de tomar mucho licor. Todos los sábados bajaba al pueblo y se emborrachaba. Un sábado cuando Moncho regresaba a su hogar en situación lamentable, a las doce de la medianoche pasando por el puente, escuchó el llanto de un recién nacido. Moncho se detuvo y bajó de su caballo y llegó hasta una rehoya que había debajo del puente. Su sorpresa no tuvo límites al encontrar una criatura de pocos días de nacida. Sintió compasión por el niño y se lo llevó consigo. El niño lloraba sin cesar y Moncho lo abrigó con su gabán, pero el llanto seguía y se acordó que llevaba un bollo de pan en sus banastas. Cogió el pan y partió un pedacito, pero se dio cuenta que el niño no podía masticarlo y entonces lo mojó en su boca para dárselo. Cuando Moncho colocó el pedazo de pan en los labios del niño, oyó una voz fuerte de hombre que le dijo: “No lo mastiques que yo tengo dientes”. En el mismo instante la nube que ocultaba la luna se hizo a un lado y a su luz brillante, Moncho pudo ver que aquella tierna criatura tenía unos larguísimos dientes que sobresalían de su boca. Tal fue el horror del jíbaro que lanzó la criatura sobre la carretera.
Una sonora carcajada rasgó el silencio de la noche y llegó a oídos del que huía. Moncho cayó gravemente enfermo. Cuando se recuperó y regresó al pueblo, lo hizo un domingo por la mañana para asistir a la misa para dar gracias a Dios por haberlo salvado del diablo. Porque, eso sí, Moncho estaba seguro de que aquel niño no era otro que el mismísimo demonio que quería castigarlo por sus excesos. Moncho se curó de su vicio. Desde entonces, según contaba la gente de aquel tiempo, si usted acertara a pasar por La Llorosa al filo de la medianoche, oirá el llanto de un niño. 

¿Qué te pareció esta leyenda?

viernes, 6 de mayo de 2011

Las leyendas



He aquí una información acerca del origen de las leyendas .


LAS LEYENDAS



Las leyendas son relatos o narraciones de su­cesos fantásticos, imaginarios o misteriosos, mez­clados casi siempre con hechos reales.
Aunque la palabra leyenda quiere decir algo para ser leído, este tipo de relato surge original­mente como literatura oral, es decir, inventada y contada por el pueblo y transmitida de genera­ción en generación, de abuelos a padres y de pa­dres a hijos. Después, con el paso del tiempo, las leyendas se escriben.
Como en el pasado había muchísima gente que no sabía leer ni escribir, las personas se me­morizaban las leyendas inventadas por autores anónimos y las contaban. Los oyentes, a su vez, también las contaban, para que otras personas las aprendieran. Así las conservaban, hasta que alguien que sabía escribir las trasladaba al papel, para garantizar que no cayeran en el olvido. Por último, alguna otra persona agrupaba las leyen­das escritas y las publicaba en forma de colec­ción. Por ese camino es que las leyendas llegan hasta nosotros.
La mayoría de las leyendas ocurren en una época y un lugar específicos, y con frecuencia tie­nen que ver con algún personaje o hecho histórico, con algún lugar geográfico conocido o con alguna costumbre propia de un país.
En Puerto Rico, el más importante recopilador de leyendas fue el arecibeño Cayetano Col y Toste (1850-1930), quien publicó, cinco años antes de su muerte, los tres tomos de sus Tradiciones y le­yendas puertorriqueñas.
El elemento principal de las leyendas es la fan­tasía. 


                                                   Edgardo Sanabria Santaliz